Cáncer: control de la fatiga
La fatiga relacionada con el cáncer es un cansancio o agotamiento extremo y persistente que puede interferir en las actividades diarias y en la capacidad para funcionar con normalidad. Es muy habitual cuando tiene cáncer o se somete a un tratamiento oncológico.
Hay muchas causas de la fatiga. Puede deberse a tratamientos contra el cáncer, a preocupaciones, a la falta de sueño, a la falta de apetito y la mala alimentación, a la poca actividad física, al dolor y a otros problemas de salud. La fatiga podría ser un síntoma de anemia. La anemia es la escasez de glóbulos rojos en la sangre. Esto podría requerir tratamiento médico. Los glóbulos rojos transportan oxígeno a todas las células del organismo y los niveles bajos pueden provocar cansancio.
Hable con el equipo de atención médica sobre la fatiga. Podrán ayudarlo a determinar posibles causas y sugerirle formas de tratar la fatiga. Los consejos a continuación también pueden servirle para que se sienta mejor.
Conserve su energía
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Registre en que momentos del día siente más cansancio y programe sus actividades de acuerdo a esto. Por ejemplo, si está más cansado por la tarde, trate de hacer sus actividades por la mañana.
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Decida qué tareas son más importantes. Ocúpese de ellas primero.
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Si no puede ocuparse de todo, pida ayuda y delegue a los demás. Solicite ayuda.
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Acepte la ayuda que le ofrezcan. Dígale a los demás cómo pueden ayudarle. Por ejemplo, podría necesitar que alguien le prepare la comida, le doble la ropa o le ponga gasolina a su automóvil.
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Programe cuándo descansar. Sería aconsejable que tomara una siesta todos los días. El simple hecho de sentarse tranquilamente durante un rato puede ayudarle a sentirse más descansado.
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Los familiares pueden ayudar con las comidas y las tareas del hogar. |
Qué puede hacer por usted
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Relájese antes de tratar de dormir. Tome un baño tibio o lea un rato.
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Adopte un patrón de sueño. Vaya a la cama a la misma hora todas las noches y levántese a la misma hora todas las mañanas.
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Coma bien. Seleccione alimentos de todos los grupos cada día. El asesoramiento nutricional puede ayudar. Intente comer varias comidas y refrigerios a lo largo del día.
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Haga ejercicio. Pregúntele al proveedor de atención médica qué tipo de ejercicios son seguros para usted. Puede salir a caminar a paso ligero para aumentar su nivel de energía.
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Evite la cafeína y el alcohol. Beba suficiente agua o jugos de fruta. Mantenerse hidratado es fundamental para prevenir y tratar la fatiga.
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Consulte al proveedor de atención médica cómo tratar el dolor.
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Reduzca el nivel de estrés. Considere probar grupos de apoyo, terapia, meditación y métodos de relajación.
Tratamiento de la anemia
Si empieza a sentirse más cansado de lo normal, dígaselo a su proveedor de atención médica. La fatiga o cansancio podría ser un síntoma de anemia. Este problema es bastante frecuente cuando se sigue un tratamiento de quimioterapia o de radioterapia. Si su recuento de glóbulos rojos es demasiado bajo, podrían recetarle medicamentos para aumentar la producción de glóbulos rojos. En algunos casos, es posible que necesite una transfusión de sangre.
Cuándo llamar al proveedor de atención médica
Llame al proveedor de atención médica si tiene alguno de los siguientes síntomas:
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Le falta de aire o tiene dolor de pecho
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Se marea cuando se levanta después de haber estado acostado o sentado
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Está más pálido de lo normal
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Tiene cansancio extremo y no se siente mejor después de descansar o dormir
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